martes, 8 de febrero de 2011

Él me hace completamente feliz.

Ríes alto, ríes fuerte, pero sobretodo ríes con ganas.Y de repente tu risa baja su volumen, no, no es que la diversión haya terminado, es que has acabado completamente afónica de tanto reír, y bueno ¿que se le va a hacer si la felicidad es un vicio? Jamás debes decirle que no a ser feliz, es resistirte a un imposible, si la felicidad te busca te encontrará, siempre y cuando te dejes ver, la felicidad te pervierte y te estalla por dentro, siempre que la desees con todas y cada una de tus fuerzas, quizá pienses que tarda, o que se toma su tiempo hasta llegar a ti, pero creeme, cuando la felicidad te corrompe y explota, cuando la diversión te atrapa y te transforma, cuando hace que cambies y te adaptes, cuando en tu nueva vida no hay cabida para una lágrima, creeme habrá merecido la pena todo tipo de espera.
Y es que bueno, al fín y al cabo lo más bonito es reír.

No hay comentarios:

Publicar un comentario